Pigres Lenus

Como con pesadez, imaginemos una mañana, en la que salgas a la calle y no te encuentres a nadie que tu conozcas, casi desértica ¿dónde se ha metido todo el mundo?

Ahora imagina, que entras a una tienda y el dependiente no te ve, no sabes si pasa de ti o no te presta atención. Hay unos agradables 25 ºC de un apacible otoño pos-estival. De repente ves que el dependiente gira la cabeza. En el pasillo contiguo, hay una exultante mujer en shorts, con un apretado top que le marca casi la piel. El avezado dependiente de la tienda, pone el aire acondicionado a unos 6 grados menos.

Pudiéndola ver a través de las estanterías, ves como se le erizan los pezones y tu te quedas paralizado ante esa bella y afrodisíaca imagen. La erógena mujer estornuda y cuando tu en un arrebato mamífero vas a socorrerla ante su futura dolencia, el dependiente se acerca y le pasa la mano suavemente por la cadera y le da un baboso beso delante de tu remachada autoestima. Sales sin pagar.

-> ¿Qué sucedió después?
-> ¿De qué era la tienda?
-> ¿Cómo podemos dormir todos los días con un fracaso?
-> ¿Por qué sientes tu corazón romperse en mil?
-> ¿Se te ocurre otra explicación?

Si alguien quiere debatir, ¡qué comente!

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