Hoy me he levantado por la mañana y he abierto después de desayunar, como otras tantas veces, el ordenador y he preguntado por qué tema quieren que hable hoy. Lleno de comprensión me he puesto a ver las respuestas y una de ellas me preguntaba "¿La gente nace destinada a ser esa persona o la vida moldea
al hombre?".
Es curioso que me hagan la pregunta de la predestinación, cuando al mismo tiempo se está tratando sobre el destino de los restos de ciertos difuntos.
Aprendiendo de ellos, solo se que aunque estemos predestinados a ser quienes somos, nunca o raramente se cumple con nuestro destino. No soy yo de los que piensan en la religión, ni en la filosofía y tampoco en la ciencia cuando tiene que responder a una pregunta como esta pero me apoyo en ellas para responder a esta cuestión.
Es cierto, que para la religión cristiana la venida de Jesús es la salvación de todos los hombres, ¿pero a que se refiere con salvación? Siendo coherente con la visión que desarrolla el cristianismo católico, tal y como lo entiendo yo, es la salvación de lo que eres en origen, fuera de artificialidad. Parecida visión también recoge la filosofía taoista, en la cual Liu I-Ming hace incapié y es en el procurado símil de "Las flores y los frutos de las plantas y de los árboles" en la que hace referencia a un orden frente a la artificiosidad de la floración fuera de fecha.
Pero a lo que voy, la ciencia hoy ha demostrado que se puede hacer que se produzcan frutos fuera de fecha mediante modificación genética y ambiental, ¿qué quiere decir? Que aunque estemos predestinados a ser lo que somos, nuestro destino puede ser cambiado, por la vía de los radicales libres (modifican el ADN) o por vía ambiental. Lo cual abre toda una nueva posibilidad de tratamiento de lo que es la persona y la personalidad no como algo estático que ha de ser tratado con sumo cuidado, sino como un origen modificable por el tiempo y el espacio.
Todo esto me lleva a formular la siguiente hipótesis: ¿Y si nuestro destino no es algo que esté quieto y que sea posible predecir?
Como dijo Séneca: "¿Llamaras tú desocupado al que gasta la mayor parte del día en limpiar con cuidadosa solicitud los vasos corintios, estimados por la locura de algunos, y pasa la mayor parte de sus días entre mohosas medallas?" Todo lo que llevaríamos sería un "perezoso negocio" ya que es imposible determinar a ciencia exacta cual va a ser nuestro destino.
Por eso me quedo con esta enseñanza: "El que posee en sí mismo la plenitud de la virtud es como el niño recién nacido: los insectos venenosos no lo pican, los animales salvajes no lo agarran, las aves rapaces no se lo llevan.
Tiene los huesos endebles y los músculos débiles, pero su energía es todopoderosa. Ignora la unión del macho y de la hembra, pero su miembro viril se yergue, tan extrema es su vitalidad. Llora todo el día sin ponerse ronco, tan perfecta es su armonía.
Conocer la armonía es captar lo Constante. Conocer lo Constante es estar iluminado. El abuso de la vida es nefasto. Dominar el soplo vital con el espíritu es ser fuerte.
Los seres que han llegado a ser fuertes envejecen, esto se opone al Tao. Todo lo que se opone al Tao muere prematuramente (Tao-Te Ching LV).
Es curioso que me hagan la pregunta de la predestinación, cuando al mismo tiempo se está tratando sobre el destino de los restos de ciertos difuntos.
Aprendiendo de ellos, solo se que aunque estemos predestinados a ser quienes somos, nunca o raramente se cumple con nuestro destino. No soy yo de los que piensan en la religión, ni en la filosofía y tampoco en la ciencia cuando tiene que responder a una pregunta como esta pero me apoyo en ellas para responder a esta cuestión.
Es cierto, que para la religión cristiana la venida de Jesús es la salvación de todos los hombres, ¿pero a que se refiere con salvación? Siendo coherente con la visión que desarrolla el cristianismo católico, tal y como lo entiendo yo, es la salvación de lo que eres en origen, fuera de artificialidad. Parecida visión también recoge la filosofía taoista, en la cual Liu I-Ming hace incapié y es en el procurado símil de "Las flores y los frutos de las plantas y de los árboles" en la que hace referencia a un orden frente a la artificiosidad de la floración fuera de fecha.
Pero a lo que voy, la ciencia hoy ha demostrado que se puede hacer que se produzcan frutos fuera de fecha mediante modificación genética y ambiental, ¿qué quiere decir? Que aunque estemos predestinados a ser lo que somos, nuestro destino puede ser cambiado, por la vía de los radicales libres (modifican el ADN) o por vía ambiental. Lo cual abre toda una nueva posibilidad de tratamiento de lo que es la persona y la personalidad no como algo estático que ha de ser tratado con sumo cuidado, sino como un origen modificable por el tiempo y el espacio.
Todo esto me lleva a formular la siguiente hipótesis: ¿Y si nuestro destino no es algo que esté quieto y que sea posible predecir?
Como dijo Séneca: "¿Llamaras tú desocupado al que gasta la mayor parte del día en limpiar con cuidadosa solicitud los vasos corintios, estimados por la locura de algunos, y pasa la mayor parte de sus días entre mohosas medallas?" Todo lo que llevaríamos sería un "perezoso negocio" ya que es imposible determinar a ciencia exacta cual va a ser nuestro destino.
Por eso me quedo con esta enseñanza: "El que posee en sí mismo la plenitud de la virtud es como el niño recién nacido: los insectos venenosos no lo pican, los animales salvajes no lo agarran, las aves rapaces no se lo llevan.
Tiene los huesos endebles y los músculos débiles, pero su energía es todopoderosa. Ignora la unión del macho y de la hembra, pero su miembro viril se yergue, tan extrema es su vitalidad. Llora todo el día sin ponerse ronco, tan perfecta es su armonía.
Conocer la armonía es captar lo Constante. Conocer lo Constante es estar iluminado. El abuso de la vida es nefasto. Dominar el soplo vital con el espíritu es ser fuerte.
Los seres que han llegado a ser fuertes envejecen, esto se opone al Tao. Todo lo que se opone al Tao muere prematuramente (Tao-Te Ching LV).
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