Gatos negros y destino

-Post de FH.


"La manera en que una persona toma las riendas de su destino es más importante que el destino mismo."

Esa es la afirmación que hizo Wilhelm von Humboldt (1767-1835), lingüista, político y pensador alemán. Y nosotros nos/os preguntamos: ¿y si nuestro destino determina ya de antemano la manera en que tomamos las riendas?


-Mi comentario.
"Existe un cuento, de Edgar Allan Poe, llamado "el gato negro", basado en una superstición en la cual las brujas se transforman en gatos negros. En este cuento se saca a relucir la superstición de un maltratador de personas y animales y, finalmente, asesino y sus remordimientos.

En épocas como las de Wilhelm von Humboldt, su manera de pensar, debió de ser totalmente revolucionaria, dado que el maltratador y asesino, del cuento que he mencionado, sería plenamente culpable de los hechos que provoca. Cosa que parece que en cierto modo descarta Poe en la recta final del cuento, poniéndose en la mente del asesino.

Desde el punto de vista penal, llevar las riendas del destino, con este cuento, sería tener en cuenta los eximentes (alteración psíquica, alteración de la percepción de la realidad, miedo insuperable), atenuantes (que sean eximentes incompletas en requisitos, adicción al alcohol, estado mental de arrebato u obcecación y confesar el delito a la policía antes de ser detenido), circunstancias agravantes (alevosía, nocturnidad, discriminación de la víctima, ensañamiento, abusar de confianza y reincidencia) y el delito (que sería homicidio o asesinato y maltrato de mujeres; maltrato de animales y muerte de animales). Desde el punto de vista humano, sería ser lo suficientemente considerado con la vida humana.

¿Si hubiera habido medios para tomar las riendas de una investigación seria, en aquel tiempo, se evitaría la muerte de gente inocente? La respuesta, es que hoy día se hacen las mismas preguntas que hace tanto tiempo, solo que evolucionadas, por ejemplo: http://www.abc.es/.../abci-parasito-gatos-esquizofrenia... . Que de ser ciertas, podrían haber absolvido al asesino en la ficción.

Siendo sincero, el destino puede tomar las riendas, pero se ha de tender a que nosotros tomemos las riendas de nuestro destino, otra cosa, como bien he argüido, es la veracidad de nuestro testimonio.

¡Gracias por el post!"

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