-Post de f & Co.
-Mi comentario.
La frase que más me ha gustado de todo este artículo, el cuál deja clara posición a las aspiraciones de Arendt en la vida, es esta:
"El hombre masa se caracteriza por su falta de relaciones sociales y su aislamiento; el fanatismo y la devoción al líder son formas de intentar huir de ese sentimiento de soledad. Defiende un valor esencial en el ser humano: la vida activa. Labor, trabajo y acción, no una vida contemplativa."
Byung-Chul Han, en su libro de "La sociedad de la transparencia" ("La sociedad de la exposición"; pag. 30), nos dice lo siguiente:
"Es obscena la hipervisibilidad, a la que falta toda negatividad de lo oculto, lo inaccesible y lo misterioso. También son obscenos los torrentes lisos de la hipercomunicación, que está libre de toda negatividad de la alteridad. Es obscena la coacción de entregar todo a la comunicación y a la visibilidad. Es obsceno el pornográfico poner el cuerpo y el alma ante la mirada."
Quizás sea algo antigua ya, puesto que hay un refrán de derechas muy actual que se menciona irónicamente diciendo:
"Comer más que Papús."
Papús fue un personaje de origen francés en los circos de exhibición que se hizo famoso justamente por no comer o ayunar a muchos extremos desde una urna de cristal transparente. La gente de derechas, jocosamente, dice hoy día que es un hombre activo, laborioso, trabajador y de acción, solo que su trabajo está a la vista de todos. Esa es la diferencia de alguien de derechas de la época de Arendt a la de hoy.
La expresión que se han venido a cargar es una muy filosófica, que dice:
"La lámpara de Diógenes."
Como todos sabemos, los cínicos iban a los lugares públicos, con una lampara, para que pudieran someterse a la burla y encontrar así a los suyos, puesto que lo que buscaba no era figuras de hombres, sino hombres de verdad, que es lo que Arendt decía con "razón", como verdad, y "hechos", como otro tipo de verdad.
El cinismo del hombre masa, hoy día, no es la burla por la apariencia, sino que es la burla por la condición, y mientras más demacrada sea, más se burlarán de nosotros y nos considerarán activos.
Soy de los de la opinión de que no hay, hoy día, una diferencia entre vida activa y vida contemplativa, solo hay medios y actitudes (como las vuestras con la página) a explotar.
Si hay algo que me gusta menos que un cínico es la desnaturalización de la filosofía cínica aplicada al mundo laboral. Por lo tanto, me queda que deciros que os estáis durmiendo en los laureles de la política y la filosofía del pasado, no atendiendo a la circunstancia de hoy, por muy bonita que sea la pasada.
¡Gracias por el post y buen día!
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