Filosofando sobre la reminiscencia y los gatos

-Post de f & Co.

"El que sabe esperar sabe lo que significa vivir en el condicional", escribe Andrea Köhler en "El tiempo regalado. Un ensayo sobre la espera". Lo publica Libros del Asteroide. ¿Cómo te llevas con la espera? ¿Sabes vivir en el condicional?

-Mi comentario.

Hay un "proverbio inglés" y un "aforismo felino" (Sir Walter Scott) que nos hablan de las cualidades de la espera, dicen así:

1º)

"A los ojos del gato todo es suyo."

Que traducido a "Aforismos" (II; 23) de Hipócrates es:

"Las enfermedades agudas hacen crisis a los catorce días."

Todo lo que no sea nuestro y agudo hace crisis a los 14 días, si hiciéramos nuestro al gato, como en el proverbio, entraríamos en crisis en parecido tiempo a nivel mental.

2º)

"Los gatos son seres misteriosos.
En su mente hay muchas más cosas de las que imaginamos."

Que en traducción a "Aforismos" (II; 24 y 25) de Hipócrates es:

"El cuarto día es indicativo de los siete. El octavo es el comienzo de otra semana y se debe observar especialmente el décimo por ser ése el cuarto día de la segunda semana. De nuevo hay que observar el decimoséptimo día, pues es, por una parte, el cuarto día a partir del decimocuarto y, por otra, el séptimo a partir del undécimo."

Si los gatos son seres misteriosos es porque carecen de este tipo de bio-ritmos con los que nos regimos en el día a día, o sea, 4º día como día premio de 7, 8º en conjunción con el 10º o 4º de la 2ª semana, 17º como 4º de la 3ª semana y 7º del 11º. Así calculaban las reminiscencias los griegos antiguos, y hoy día en medicina.

"Las fiebres cuartanas son, por lo general, de breve duración en verano, largas en otoño y más aún las que se dan próximas al invierno."

Las reminiscencias, o "fiebres cuartanas", son de breve duración en verano (luego se aprende más, pero más fragmentado), largas en el otoño (luego construyes mejor), y más largas en el invierno (luego puedes prolongar el aprendizaje más). Por eso es por lo que se aprende en otoño e invierno, en primavera te confundes y en verano parece que no te cabe nada en la cabeza pero vas con el turbo puesto.

La espera la manejo muy mal, porque para mi son inviernos larguísimos y veranos extremadamente cortos. Por lo cual, vivo casi todo el tiempo en condicional, excepto en determinados períodos del otoño y la primavera, que voy más acompasado a los demás.

Ese es mi vivir en condicional y mi espera.

¡Gracias por el post y buen día!