-Post de f & Co.
Noel Clarasó (1899-1985), escritor español.
-Mi comentario.
Hay un koan que habla sobre la tontería que me gusta citar, se llama "Yüeh-shan lo capta", nos dice así:
"El gobernador de un estado le preguntó a Yüeh-shan: "Según tengo entendido, todos los budistas deben poseer Shila (preceptos), Dhyana (meditación) y Prajna (sabiduría). ¿Guardas tú los preceptos? ¿Practicas meditación? ¿Has alcanzado la sabiduría?". "Este pobre monje no tiene ese tipo de basura por aquí", replicó Yüeh-shan. "Debe ser una enseñanza muy poderosa", replicó el gobernador, "pero yo no la entiendo". "Si quieres captarlo", continuó Yüeh-shan, "debes escalar la montaña más elevada y sentarte en la cima, o sumergirte en el mar más profundo y caminar sobre el fondo. Si ni siquiera puedes meterte en la cama sin tener una pesada carga en tu mente, ¿cómo vas a poder alcanzar y captar mi enseñanza zen?""
Hoy pasa la "Vuelta Ciclista a España" al lado de mi casa, uno podrá pensar que un ciclista que va por la costa y sube montañas a golpe de pedal no guarda ningún precepto, ni medita, ni tiene sabiduría, no hay cosa más alejada de la realidad. No hay dualidad, precepto, meditación o sabiduría mas que la del cuerpo, mente o samsara, por eso no hay nadie tonto.
El médico védico Patanjali, en su "Yoga-Sutra" (III.1-3), nos lo aclara del siguiente modo:
"deshabandhashcittasya dhâranâ"
O:
"La mente ha alcanzado la capacidad de ser dirigida (dhâranâ) cuando la dirección hacia un objeto escogido es posible, sin tener en cuenta la existencia de numerosos objetos potenciales al alcance de la persona."
Cuando tu cuerpo piensa y no es distraído por el entorno tienes una dirección, como el ciclista.
"tatra pratyayaikatânatâ dhyânam"
O:
"Entonces las actividades mentales forman una corriente ininterrumpida, en relación exclusiva con el objeto."
Piensas mejor atendiendo a tu cuerpo y a su voluntad que memorizando e interiorizando todos los objetos que tienes a tu alrededor, la corriente es lo que vives y cómo lo captas.
"tadevârthamâtranirvhâsam svarûpashûnyamiva samâdhih"
O:
"Pronto la persona está tan absorbida por el objeto que ya sólo es aparente la comprensión de dicho objeto. Es como si la persona hubiese perdido su propia identidad. Es la integración completa en el objeto de comprensión (samâdhi)."
Si sientes internet de la misma manera que los ciclistas, de la Vuelta, han pasado por al lado de mi casa, no hay nada que desconozcas, ni en preceptos, ni en meditación o ni en sabiduría, porque digamos que te envuelve, y no es mera disposición como la del gobernador del koan que he puesto.
Por lo tanto, la clave aquí, está en el entorno y en la vivencia que eres capaz de absorber, si esa experiencia es estúpida, tus palabras lo serán también, y si no estás adaptado no podrás superar la prueba, como le pasa al ciclista que abandona.
¡Gracias por el post y buen día!
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